Se modera la caída en las bolsas en la mayoría de los casos; pero, continúa el nerviosismo.
La tendencia de las bolsas durante la semana fue negativa; aunque, en la mayoría de los casos se experimentó una mayor calma y movimientos menos pronunciados respecto a las fuertes caídas de la semana previa.
El índice MSCI que incluye emergentes (ACWI) bajó cerca de (-) 0.9 por ciento en la semana.
El S&P 500 se mantuvo prácticamente estable; mientras que el Stoxx Europe 600 perdió (-) 1.7 por ciento en la semana.
El peor desempeño lo tuvieron los principales referenciales en Asia, el Hang Seng cayó (-) 3.6%, el Nikkei (-) 1.9% y el Shanghái Composite (-) 3.2 por ciento.
La razón detrás del nerviosismo de los inversionistas sigue siendo la guerra comercial y el temor que esto se pueda volver ahora en una guerra de divisas.
Y es que la forma de responder de China a las nuevas amenazas comerciales del Presidente Trump fue permitir la devaluación del yuan; que llegó a tocar su cotización máxima en once años frente al dólar.
Este fue el foco del mercado, como ya anticipábamos que ocurriera en nuestra publicación previa. Y probablemente seguirá siendo el principal factor a considerar en las decisiones de inversión.
Las declaraciones de Donald Trump al cierre de la semana fueron poco alentadoras, al señalar que un acuerdo comercial con China no es inminente. En especial señaló que las conversaciones programadas para septiembre podrían ser canceladas.
La otra variable que mantiene a los inversionistas a la expectativa es la evolución de la política monetaria; y es que, en días recientes dos miembros del a FED hablaron a favor de los recortes en tasas de referencia.
Los presidentes de la FED de St. Louis y Chicago emitieron declaraciones apuntando a que podrían ser deseables nuevos recortes de tasas de interés para contrarrestar la lenta inflación y el freno al crecimiento, con la incertidumbre sobre las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China.
Adicionalmente, en Europa se mantienen los riesgos de un Brexit sin acuerdo; mientras que, en Italia existe la posibilidad de elecciones anticipadas tras una crisis en el gobierno de coalición.
La bolsa mexicana se alejó de esta tendencia de baja global y el S&PBMV IPC logró romper la racha de cuatro semanas consecutivas a la baja; sin embargo, lo que no ha logrado es regresar a niveles superiores a los 40 mil puntos.
En la semana destacó el importante movimiento alcista de Peñoles, beneficiada por la ganancia semanal del oro; que respondió a la incertidumbre experimentada en los mercados por lo antes mencionado.
¿Qué esperar en los próximos días?
Dentro de la agenda económica de Estados Unidos esta semana destaca la inflación, producción industrial y ventas minoristas de julio, así como la encuesta manufacturera de NY y el dato preliminar de confianza al consumidor de la U. Michigan en agosto.
En la Eurozona se publica el PIB del 2T-19 en su lectura preliminar. El consenso de Bloomberg espera un crecimiento (AaA) en la economía del bloque de 1.1 por ciento. También se revela el reporte de expectativas económicas del centro ZEW.
En días recientes el boletín económico del BCE apuntaba ya lo evidente: la prolongada incertidumbre está dañando al panorama de crecimiento de la zona euro; sobre todo para los bienes manufacturados.
En Reino Unido es relevante la inflación, desempleo, ventas minoristas, producción industrial de julio, entre otros indicadores económicos.
En China se conocerán las ventas minoristas, inversión extranjera directa, producción industrial y precios de vivienda nueva de julio; mientras que en Japón se publica la producción industrial de junio en su lectura final y la inflación al productor de julio, entre otros.
En México habrá reunión de política monetaria de Banxico, nosotros, y el consenso en general, anticipamos un recorte en la tasa de referencia. Esto podría contribuir a restar presiones a la valuación de los activos de riesgo en México; aunque, reconocemos que el entorno económico incierto está impactando negativamente al atractivo de la bolsa mexicana.
También se publican las ventas de la ANTAD, su desempeño podría ayudar a medir si la debilidad que vimos en los indicadores recientes de WALMEX estuvieron relacionados solamente a las campañas promocionales agresivas de la competencia, o si existe un deterioro generalizado en el consumo.
Revelaciones Importantes