Tasas y Tipos de Cambio
Deuda Gubernamental
Las tasas de interés de largo plazo de los Bonos del Tesoro de los Estados Unidos marcaron movimientos de baja durante la semana con respecto al cierre semanal previo. Con datos del consumo, inflación, producción industrial y solicitudes por seguro de desempleo con mayor impacto entre los participantes del mercado.
Los datos de inflación, sobre todo de la parte subyacente, fueron menores a lo esperado por el consenso del mercado y con la nueva guía de expectativas por parte de la FED implica que los inversionistas observan que en promedio la inflación tardará mucho tiempo en alcanzar el objetivo de inflación de 2.0%. De aquí la reacción de menores niveles de los réditos. Lo que se reafirmó con los datos de las solicitudes semanales por seguro de desempleo que repuntaron y datos de la producción industrial en terreno negativo. Esto a pesar de que se dieron buenos datos de ventas al menudeo, por arriba de las expectativas. (Para mayores detales ver semanal del Economía)
Con lo anterior, y las preocupaciones por el aumento de casos en Europa que pudiera repetirse en los Estados Unidos, las tasas de interés de los Bonos del Tesoro Norteamericano pasaron de 0.78% a 0.73% para el vencimiento a 10 años. En general, el mercado mantiene la idea de una recuperación en marcha, pero con cierta preocupación de la sustentabilidad de la misma, por la evolución de la pandemia en Europa y que pudiera repetirse en los EE.UU. y también por el proceso electoral norteamericano. De esto último depende que monto en el nuevo paquete de estímulos fiscales se aprobará para seguir sosteniendo la recuperación de los niveles de crecimiento en la economía norteamericana.
En México, el mercado de tasas había observado una revaluación durante gran parte de la semana anterior y esta, como resultado de la entrada de inversionistas extranjeros, los cuales tomaron posiciones en los plazos más largos de la curva de rendimientos de los Mbonos, esto incluso se reflejó en el tipo de cambio. Sin embargo, al cierre de la semana la presión en la curva de rendimientos se volvió a presentar. Por lo que el bono de 10 años cerró la semana alrededor del 6.13%, con 7 puntos base de alza con respecto al cierre semanal previo. Bajo esta métrica, el diferencial con el bono del Tesoro Norteamericano se ubicó sobre los 540 puntos base. Este comportamiento de las tasas de interés mercado de papeles gubernamentales a nivel local fue resultado de la materialización de plusvalías acumuladas durante las semanas previas y de participantes tomando precauciones de cara a las elecciones norteamericanas, donde se podría dar algún tipo de conflicto postelectoral a pesar de las diferencias que hoy muestran las encuestas de preferencias electorales.
Para esta semana que inicia tenemos la publicación de la inflación de la primera quincena de octubre. Veremos quizá una inflación relativamente alta, esto como resultado de la terminación de los subsidios de las tarifas eléctricas aplicados durante el verano. En términos generales, la inflación general se estima en 0.45% (Invex Análisis), con lo que la anual sería 3.99%% (por debajo marginalmente del límite superior del rango de tolerancia del objetivo de 3.0%). Pero la parte subyacente se ubicaría en 0.16% en la quincena y 4.02% en términos anuales. Por lo que seguimos pensamos que el Banco de México no tienen las condiciones por el lado de la inflación para hacer movimientos en la tasa, al menos, para la siguiente reunión de política monetaria.
Deuda Corporativa
KIMBER: La empresa Kimberly-Clark de México reportó resultados financieros correspondientes al tercer trimestre del presente año. Los ingresos totales de la compañía reportaron un incremento de 7% aproximadamente gracias al aumento en el volumen, ya que los precios permanecieron sin cambios. El EBITDA creció 8% para dar como un resultado un margen Ebitda de 25.6%. La utilidad neta presentó un aumento de 9%. El monto del costo financiero presentó un crecimiento de 9% debido a la colocación de una deuda nueva por la cantidad de $500 millones de dólares cuyo objetivo es pagar vencimientos de 2020 y 2021. OPINIÓN: Positiva. Tal como lo marcaban las expectativas de los mercados financieros, tanto las ventas totales como la rentabilidad de la empresa presentaron alzas importantes, en parte se debe a la fuerte demanda que tuvieron sus productos por la pandemia. Gracias a los incrementos mencionados, la compañía va a contar con mayores posibilidades de cumplir con compromisos financieros. La deuda neta de la empresa concluyó el trimestre con $11,100 millones de pesos. Cabe indicar que la deuda de largo plazo forma el 81% de la deuda total. Deuda neta / Ebitda se encuentra en niveles de 0.90x. La empresa tiene una buena postura para enfrentar la situación actual de los mercados financieros.
NRF: La entidad calificadora Standard & Poor’s tomó la decisión de confirmar y mantener calificaciones de mxAA+ para las emisiones de Certificados Bursátiles de Nissan Renault Finance de México (NRF 18 y NRF 19). También mantuvo la calificación de mxA-1+ para los Certificados Bursátiles de Corto Plazo de la empresa. En lo que se refiere a perspectiva, se mantiene en Negativa. Las calificaciones de las emisiones de deuda de NRF se basan en la garantía incondicional que se tiene con Nissan Motor Acceptance Corporation cuya calificación es BBB-. OPINIÓN: Positiva. A pesar de mantener una perspectiva Negativa, el hecho de continuar una calificación de AA+ en un ambiente negativo provocado por la pandemia del COVID-19 es favorable. La calificadora le proporciona una probabilidad de 1/3 de bajar la calificación ante el deterioro de su desempeño operativo o desempeño financiero. Actualmente, la compañía tiene dos Certificados Bursátiles de Largo Plazo (NRF 18 y NRF 19), los cuales forman un monto total de $4,640 millones de pesos y con una estructura de tasa flotante.
Tipo de Cambio
En el mercado cambiario, la valuación del dólar operó en un rango de $21.10 a $21.54 pesos por unidad a lo largo de la semana, pero con menor fortaleza en el movimiento de revaluación del peso. Se habían dado flujos positivos en semanas previas que ayudaron a consolidar una apreciación del peso. Ahora sin que se de presión para la moneda nacional, vemos que el movimiento a su favor se agotó. Sin embargo, se mantiene un diferencial de tasas de interés atractivo y con flujos de remesas y acumulación de reservas y con datos favorables de comercio exterior; lo cual le da cierta solidez a la moneda nacional.
Consideramos que en los días por venir el comportamiento del cambiario podría sufrir de volatilidad y favorecer un movimiento de recuperación del dólar, esto conforme se acerque la fecha de las elecciones en los Estados Unidos y quizá el nerviosismo de los inversionistas se incremente por el resultado del proceso electoral.